INTRODUCCIÓN
En nuestro viaje a Bélgica teníamos algunas cosas claras y ver Gante no era una de ellas ya que, por falta de tiempo, teníamos otras prioridades. Pero al final decidimos hacerle un hueco y pasar parte de un día allí, pues todo el mundo lo recomendaba. No nos arrepentimos de haberlo hecho, ya que nos gustó incluso más que otras ciudades más turísticas como puede ser Brujas.
Nosotros fuimos en tren desde Bruselas ya que para nosotros era lo más cómodo. Para colmo, nuestros dos hijos pequeños de seis y once años viajaban gratis. Aquí os dejamos el enlace donde hicimos la compra de los billetes con los horarios y precios del tren.
La estación Sint Peeters de Gante se encuentra al sur de la ciudad. Para llegar al centro podréis coger el tranvía uno o cuatro y llegareis en tan solo cinco minutos, o hacer una caminata de casi tres kilómetros en la que tardamos una media hora.
DESCRIPCIÓN
Para empezar nuestra visita decidimos ir la Catedral de San Bavón, ya que era lo que más alejado estaba del circuito que íbamos a hacer. Tenéis más sobre ella, precios y horarios clicando en su enlace.

Como llegamos poco antes del medio día, dudamos entre ir al Castillo de los Condes de Flandes o comer primero. Nos decantamos por esto último y para ser rápidos decidimos comer en la cadena de tacos franceses O´tacos.
Nada más terminar de comer, nos dirigimos al castillo pues quedaba pocas horas para su cierre. Su horario es de 10 a 18 h. Es sorprendente ver un castillo medieval en el centro de la ciudad. Al llegar nos llevamos un chasco y es que no se podían comprar más entradas, pues estaban agotadas. No teníamos ni idea que había un número limitado para acceder a él. Así que tenemos que resaltar el adquirir los tickets por internet para que no os pase lo mismo que a nosotros. Al final nos tuvimos que conformar con disfrutarlo por fuera.

Dado que no pudimos entrar, dimos media vuelta y nos dirigimos de nuevo al centro. Lo hicimos por Kleine Vismarkt, pasando por el puente que cruza el río Lys y disfrutando de sus vistas. Este es un bonito lugar también para dar un paseo en barca y ver la ciudad desde otra perspectiva diferente.

Para no perder detalle de la ciudad os recomendamos alguno de los variados free tours que existen, en los que un guía os explica en español la historia que hay detrás de cada edificio.
📎 Free tour por el Gante escondido
Y para los más atrevidos existe un free tour que se realiza por la tarde cuando el sol ha caído en el que nos muestran la cara más enigmática y oculta de la ciudad de Gante.
📎 Free tour de los misterios y leyendas de Gante
Después de disfrutar de las vistas, continuamos con la visita a la ciudad. Pasamos el puente y vamos hacia la izquierda en dirección a la Plaza de Vrijdagmarkt.
De camino hacia ella, nos encontramos con el cañón Dulle Griet. Esta bombarda medieval fue construida en la primera mitad del siglo XV, a partir de treinta y dos barras de hierro contenidas por sesenta y un aros metálicos. Las bocas se le taparon recientemente, pues lo usaban los indigentes para dormir. Cerca de aquí hay una cervecería que toma el mismo nombre y es un buen sitio para probar alguna de sus más de 250 cervezas diferentes.

Enseguida llegamos a la Plaza de Vrijdagmarkt, la más antigua de la ciudad. Es una amplia plaza con mucho ambiente y numerosas terrazas en la que encontramos en su centro una estatua dedicada a Jacobo de Artevelde. Su nombre significa Mercado de los Viernes, de ahí que ese día tenga lugar el mercadillo de alimentos. A nosotros nos gustó incluso más que la Plaza Korenmarkt.

Luego nos acercamos a ver una iglesia que está muy cerca de la plaza anterior, nos referimos a la Iglesia de Santiago. Esta iglesia es muy querida por los habitantes de allí, ya que se encuentra en uno de los caminos de peregrinación a Santiago. Ha estado en reformas continuamente. Su interior combina elementos y obras de estilo románico y barroco.

Desde nuestro punto más al norte, fuimos bajando y lo hicimos por una calle muy famosa. Se trata del callejón de los grafitis llamado Werregarenstraat. Aquí los artistas callejeros pueden dar rienda suelta a su arte. Hemos de decir que, aunque la idea de que se dedique una calle a esto nos parece genial, nos defraudó un poco pues esperábamos más debido a las buenas opiniones que leímos.

Nada más salir de la calle anterior, en pocos pasos damos con el edificio más curioso que hemos visto por allí: el Ayuntamiento de Gante. Podemos decir de él que tiene doble personalidad, y es que su fachada se divide en dos estilos claramente apreciables: el gótico y el renacentista. La fachada renacentista se encuentra en la parte situada en Botermarkt, mientras que en la esquina con la calle Hoogport encontramos la parte gótica, la cual rápidamente llama nuestra atención.

Muy cerca del ayuntamiento, tal como nos muestra la imagen, tenemos la Torre Belfort. Esta se encuentra entre dos grandes iglesias: la catedral de San Bavón, la cual hemos mencionado al principio, y la Iglesia de San Nicolas. Desde arriba tenemos unas vistas impresionantes de toda la ciudad. Podemos subir cualquier día de diez de la mañana a seis de la tarde. Nosotros subimos por el ascensor que te lleva hasta la planta de arriba, descendiendo posteriormente por sus características escaleras.

Para finalizar nuestra visita nos dirigimos a los Muelles de graslei y korenlei. Estos muelles eran el antiguo puerto. Desde él se transportaban no solo tejidos y lanas, sino también otras materias que hacían de Gante una ciudad próspera en la Edad Media. Desde este punto podemos coger las embarcaciones que recorren el río Lys y sus canales. Goza de gran tranquilidad y belleza, un lugar que a los peques encantó y que es perfecto para pasear.

Volviendo hacia la estación aprovechamos para ver el Puente y la Iglesia de San Miguel. Nosotros no tuvimos tiempo de más, pero hay algunos museos interesantes para ver.
Si solo disponéis de unas pocas horas para visitar la ciudad se puede aprovechar para reservar un tour privado en español o una visita guiada por el centro histórico, en ambos casos con un guía de habla español y una duración de entre 2 y 5 horas.
📎 Tour privado por Gante con guía en español
CONCLUSIÓN
Nos encantó la ciudad y, al no ser extremadamente turística como otras, la pudimos disfrutar tranquilamente. Cuenta con mucha historia, lo que la hace muy interesante. No está tan masificada y esto es un gran punto a su favor. Un lugar que se deja ver y que quizá, rodeada de tanta ciudad bella, pasa más inadvertida a pesar de lo mucho que nos puede ofrecer. ¡No dejes de probar el Cuberdon, típico dulce belga! Muy conocido en la gastronomía de Bélgica.
Aquí os dejamos un mapa resumen para orientaros con más facilidad donde podréis ver, de un solo vistazo, todos los lugares que os hemos mencionado en este post.
Muy buena guía, como de costumbre. Concisa y c!ara.
Nos alegramos que veas su utilidad. Muchas gracias 😊
¡IMPRESIONANTE¡
¡Y que lo digas! Una pequeña ciudad que superó nuestras expectativas 😊
! Magnífico recorrido que nos hace buena idea de lo bella que es y con la explicación tan exhaustiva y real que hacéis, es una «obligación» el conocerla presencialmente .
Es preciosa. No tiene tanto nombre como Brujas, pero igualmente interesante ☺️